Puede ser el fin de Williams en la F1


Si sois fieles seguidores de la F1 como yo, probablemente ya sepáis de esto, pero por lo visto Rokit ya no es el patrocinador principal de Williams, lo que ha supuesto que la histórica escudería se haya visto obligada a ponerse el cartel "en venta".

Personalmente, le tengo mucho cariño a esta escudería. En casi todos los juegos de F1 que he tenido, Williams siempre ha tenido un papel fundamental en mis trayectorias. De hecho, en estos videojuegos le he ido pillando cariño a diferentes escuderías, pero Williams era de mis favoritas.

Volviendo al mundo real, Williams es una de las escuderías históricas del Gran Circo. Cualquier fan del motorsport odiaría que McLaren, Ferrari o Williams dejasen la Formula 1. Ya pasó con Sauber, absorbida por Alfa Romeo, y probablemente pase ahora con Williams.

Me gustaría que, quienquiera que venga mantenga el nombre Williams. Pero siendo sinceros, creo que eso solo pasará en caso de que quien venga sea accionista minoritario. Si lo hace de un modo mayoritario o comprando la totalidad de la empresa, dudo mucho que volvamos a ver la W azul en los bólidos de Grove.

Sea como fuere, espero que en el futuro, la escudería empiece a renacer y consiga volver a tener la gloria que el inexorable paso de los años la ha ido mermando. Es tiempo de reverdecer esos laureles, Williams.

Tamborrada 2020


Ya se terminó la tamborrada de este año. 24 horas de banderas, cantineras, gastadores, tambores, barriles, emoción, marchas, canciones, y demás cosas ligadas al día grande de San Sebastián. Muchos son los y las donostiarras que participamos de este día. Los hay incluso que acuden desde otras localidades e incluso desde otras provincias a ver, oír y tocar durante este día.

Yo personalmente he estado, como siempre, tocando desde el momento de la izada hasta más o menos las 4:00 por el barrio que me vio crecer: Amara. Desde el ambulatorio hasta el Amara Plaza pasando por el Esparru, Armerías, Ikasbide y Donosti. Volver una vez finalizado todo al punto de inicio. Tocar todo el repertorio de Sarriegi e incluso alguna que otra. Pasar frío es parte de la penitencia que ha tocado este año; otras veces toca mojarse. Pero todos los participantes disfrutamos de cada golpe y de cada redoble.

Desde el año pasado aprendí además a ver otras tamborradas. Ser parte pasiva de ellas. Ver y no tocar. Disfrutar. Querer tocar más y pensar en el doblete. Espero que ocurra, la verdad.

Lo curioso de esta fiesta es que no es más que la evolución y transformación de una curiosa anécdota histórica. Hoy día no todos somos conscientes que cuando nos enfundamos el traje de soldado, de cocinero o de aguadora estamos siendo historia viva de nuestra ciudad. Lo que el día de San Sebastián se recuerda pasó en el pasado.

Muchos son los que no nos entienden. Los que no comprenden el sentimiento que hay detrás de cada acorde de las charangas, del alumnado de la mayoría de colegios donostiarras que pasa frío durante la tamborrada infantil. Es algo que es parte de nuestro ADN.

Nunca seré un óptimo guía turístico, pero a todo aquel que no haya visto nunca la tamborrada le recomendaré que, si puede, se pase un 20 de Enero por la ciudad de Donostia/San Sebastián y que callejee cuanto sus piernas le permitan. La fiesta se vive en cada calle de todos y cada uno de los barrios donostiarras. En definitiva, una fiesta sin igual.

Bagera!